Pero, ¿qué más he aprendido?

A estas alturas he hecho y presentado una gran cantidad de trabajos y propuestas, tanto en esta asignatura como en otras, y en todas estas han insistido en la presencia de diversidad en el aula. Y es que, vivimos en un mundo repleto de culturas, tradiciones, contextos y situaciones diferentes que crean a personas heterogéneas. O bueno, sin ir más lejos cada uno tiene unos gustos, pensamientos y formas de entender la vida que hacen que seas de una forma u otra, pero al fin y al cabo no somos diferentes, somos personas únicas. Por ello debemos respetarnos entre nosotros y nosotras, de hecho, gracias a la propuesta de “Menores trans” he aprendido que todavía queda mucho trabajo por hacer, todavía quedan muchos aspectos por normalizar en nuestra sociedad y por ello hay que empezar desde bien pequeños. Habitamos y crecemos en un mundo lleno de estereotipos y roles que se reproducen en el aula, por eso tras la visualización de los dos vídeos tratados en la propuesta nombrada anteriormente he aprendido que, está en nuestras manos la normalización de numerosos temas que son esenciales para acabar con una sociedad que vive pero no deja vivir a aquellas personas que son “diferentes”.

Desde que comencé la carrera he tenido la mentalidad de que antes de comenzar a trabajar la lectoescritura o aspectos lógicomatemáticos es necesario trabajar ciertos valores éticos y morales, y con este taller sobre la transexualidad corroboro lo anterior. Pues me ha mostrado como todavía los niños y niñas crecen en entornos en los que, algo que se sale de lo “normal” y no está bien visto, se discrimina, margina, excluye y critica. Por ello, creo que en el ámbito educativo se deben trabajar otros tipos de aspectos, y con esto no me refiero a quitar por completo los aspectos trabajados tradicionalmente en el aula. Pero, el alumnado está en el centro educativo el tiempo suficiente para también trabajar otros muchos temas y que son de vital importancia como; la honestidad, humildad, el respeto, la responsabilidad, la sensibilidad, la empatía, la diversidad, etc. De hecho, considero que trabajar estos en educación infantil sería lo más idóneo pues se encuentran en una etapa en la que su mentalidad está limpia y sin prejuicios, de tal modo que si no les mostramos esa “normalidad” durante esas edades, después ya será “tarde” porque su mente ya estará “contaminada”. Aunque también quiero recalcar que estos son aspectos que también se deben inculcar en casa, junto a las familias. El problema es que estas han crecido en un entorno o época en la que su forma de pensar es totalmente diferente a la actual y seguirán reproduciendo valores discriminatorios. Por lo que debemos normalizar aspectos y trabajarlos no solo con el alumnado, también tendremos que hacérselos ver a las familias de los pequeños y las pequeñas, esto hará que el proceso sea lento, pero no creo que sea imposible.   

Esto no es todo, también he trabajado aspectos más teóricos a través de la lectura de textos, que como ya te dije en una videollamada no me complace, pero tampoco disgusta hacer estas lecturas. Con esto me refiero a que cuando tengo que trabajar estos me cuesta, pero les dedico el tiempo que sea necesario e intento extraer la mayor información de cada uno de estos para así comprenderlos y asimilarlos. Pero, voy a ser sincero, te estaría mintiendo si te digo que aprendo de la misma forma que cuando hemos trabajado mediante una sesión mucho más práctica. Por otro lado, quiero recalcar, que sí que ha habido textos que hemos trabajado y que han causado en mí mayor valor o interés como es el caso de “La auto-evaluación como práctica promotora de la democracia y la dignidad” de Juan-Miguel Fernández-Balboa.                            Dicho texto me ha hecho entender la importancia de cambiar la forma de ver la educación y su sistema de evaluación. Este me ha mostrado otra propuesta y forma de llevar a cabo la evaluación, y que es mediante la auto-evaluación, que si se desarrolla en la escuela va a suponer en el alumnado una mejora tanto en su rendimiento académico como en su interés por aprender, una forma de evaluar que opta por una educación decente, generosa y relevante.

En el caso de aquellos textos que me han costado un poco más, creo que he sido práctico, y sobre todo, capaz de analizarlos y reflexionar, de tal forma que en un futuro, cuando esté dedicándole tiempo a la educación física, sea capaz de recordar que mediante esta no tan solo le dedicamos tiempo al ejercicio físico como tal. O que mediante esta, no tan solo juegan, sino que pueden trabajar una gran variedad de contenidos que están presentes en la asignatura como la espacialidad, la creatividad, la expresión corporal, las emociones, la lateralidad entre otros aspectos que he conocido tras la lectura del texto “Justificación de la educación física en educación infantil de Pedro Gil-Maradona, et al (2008)”.                                                              Respecto a esto, principalmente he aprendido a trabajar la espacialidad, pues es el contenido que tuve que tratar junto a mi grupo de forma más profunda, a pesar de eso, me interesé, informé y visité los blogs de mis compañeras pues quería conocer sus propuestas y cómo trabajar otros contenidos mediante la educación física. Y dado que ha aparecido y he nombrado los blogs, voy a decir mi opinión sobre esto. Sin duda considero que es una gran herramienta de aprendizaje y que nos ha servido para exponer nuestras propuestas y conocer las del resto, además, mediante estos tenemos un compendio de material, propuestas y actividades a las que podemos recurrir.